Soy pequeño, pequeñito,
más con tal poder y arte que,
si no me pegan bien,
no van a ninguna parte.
más adivinanzas de libros y escritura...
Jamás aprendí a escribir y soy muy gran escribana y, con invención galana, te suelo siempre servir sin cansar tarde y mañana.
Una palomita, blanca y negra; vuela sin alas y habla sin lengua.
Blancos son los campos, las semillas negras, cinco son los bueyes que el arado llevan.
Aunque sea tan pequeño, siempre separo y siempre detengo.
Muy chiquito, chiquitito, que pone fin a lo escrito.
Contengo todas las letras, los números y los signos, si me aprietan con los dedos escriben hasta los niños.
Con mis hojas bien unidas, que no me las lleva el viento, no doy sombra ni cobijo, pero enseño y entretengo.
Sin ser árbol, tengo hojas, sin ser bestia, un buen lomo y mi nombre en cada tomo.
Yo salgo todos los días por eso me llaman diario. Estoy lleno de noticias, sucesos y comentarios.
Todas las palabras sé y, aunque todas las explico, nunca las pronunciaré.
