Soy pequeño, pequeñito,
más con tal poder y arte que,
si no me pegan bien,
no van a ninguna parte.
más adivinanzas de libros y escritura...
Sin ser árbol, tengo hojas, sin ser bestia, un buen lomo y mi nombre en cada tomo.
Sabana blanca tendida, mariquita negra le baila encima.
Bolita tengo tinta, también capucha tengo y escribo bien.
Cae de la torre y no se mata, cae en el agua y se desbarata.
Muy chiquito, chiquitito, que pone fin a lo escrito.
Como una ametralladora se escucha mi tableteo; pero estoy en la oficina, que mi oficio no es guerrero.
Tengo hojas sin ser árbol, te hablo sin tener voz, si me abres no me quejo, adivina quien soy yo.
Es un sabio gordinflón, si le preguntan no habla, sabe todas las respuestas, tiene todas las palabras.
Cruza los ríos, también los mares, vuela sin alas a todas partes.
Sin hablar puedo decir lo que mi dueño ha pensado; tengo un carro, aunque sin mula, y me muero en tres espacios.
