Un convento bien cerrado,
sin campanas y sin torres
y muchas monjitas dentro,
preparan dulces de flores.
más adivinanzas de la naturaleza...
En mí se mueren los ríos, y por mí los barcos van, muy breve es el nombre mío, tres letras tiene no más.
Kilómetros mido, hectolitros llevo, kilovatios doy, hectáreas mantengo.
Sin vacación en sus cursos, al principio son pequeños, suelen nacer en montañas y morir de marineros.
Hay un hijo que hace nacer a la madre que le dio el ser.
No soy estación del Metro ni soy estación del tren, pero soy una estación donde mil flores se ven.
Nazco en lugares abruptos sin haber tenido padre y conforme voy muriendo va naciendo mi madre.
En el cielo soy de agua, en la tierra soy de polvo, en las iglesias de humo y mancha blanca en los ojos.
En las regiones polares se encuentra en todos los mares.
Aparece por delante, por los lados, por la espalda, te descuidas un instante y te levanta la falda.
Alas de mil colores y se pierden entre las flores.