Me pones y me quitas,
me tomas y me dejas,
conmigo no tiritas
y estoy hecho de madejas.
más adivinanzas de ropa y vestuario...
Tienen justo cinco dedos como la mano; se rellenan en invierno, se vacían en verano.
Para salir a la esquina ponte pan en el talón y camina.
Pisados, siempre en el suelo, recibiendo malos tratos, y sin señales de duelo.
En las manos de las damas casi siempre estoy metido, unas veces desplegado otras veces recogido.
Juntos, en ovillo, duermen los mellizos; cuando se separan, estirados andan.
No he de darte más razones, sin mi perderías los pantalones.
Ahí vienen dos: uno se moja y el otro no.
Mi ser por un punto empieza, por un punto ha de acabar, el que mi nombre acierte sólo dirá la mitad.
Me lleváis, me traéis, y si sois nuevos quizás me mordéis.
Guardado en invierno, lo luzco en verano, es mi único traje en sitios de baño.