Tiene un ojo y nada ve,
por abrir no es cosa dura,
sin embargo por cerrar,
sí que cierra y sí que es dura.
más adivinanzas de cosas de la casa...
No soy el sol, tampoco el fuego; pero la casa bien que caliento.
Estoy dentro de él y no puedo entrar en él.
Soy de cabeza redonda y me sostengo en un solo pie. Soy de tal fortaleza que a Dios hombre sujeté.
Golpe va, golpe viene y en su puesto se mantiene.
Aunque tengo cuatro patas, yo nunca puedo correr, tengo la comida encima, y no la puedo comer.
Aunque no hable, lo cuenta todo por cable.
Del techo al suelo, cortada y fina, tela con vuelo.
Es verdad que tú le miras, es mentira que te ve, sois iguales uno al otro, está claro que eres él.
Pequeña como una pera y alumbra la casa entera.
En el campo fui nacida, vestida de verdes ramas, y al pueblo me trajeron, para servir a las damas, a mí todo me regalan, caramelos, miel, melada, mas yo todo lo reparto, porque no sé comer nada.