Formamos, como soldados, en una fila
y somos carniceros toda la vida
más adivinanzas del cuerpo humano...
Adivina, adivinanza, tiene un solo ojo y una cara ancha.
Con ella vives, con ella hablas, con ella rezas y hasta bostezas.
Dos hermanos sonrosados, juntos en silencio están, pero siempre necesitan separarse para hablar.
En un huerto no muy llano hay dos cristalinas fuentes, no está a gusto el hortelano, cuando crecen las corrientes.
Una señora, muy enseñoreada, siempre va en coche y siempre va mojada.
Formamos, como soldados, en una fila y somos carniceros toda la vida
Unas son redondas, otras ovaladas, unas piensan mucho, otras casi nada.
Aunque sepas ésto, mago no serás, si no sabes dónde, lo digerirás.
Vive en la panza y se enseña en ciertas danzas.
Parecen persianas, que suben y bajan.