En un cuarto me arrinconan
sin acordarse de mí,
pero pronto van a buscarme
cuando tienen que subir.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Soy de cabeza redonda y me sostengo en un solo pie. Soy de tal fortaleza que a Dios hombre sujeté.
Cabezón y muy delgado, que se pone siempre negro, después de haber sido frotado.
Pino sobre pino, sobre pino, lino, sobre lino, flores y alrededor amores.
Sin ella en la mano ni entras ni sales, ni vas a la calle.
Está hecha de metal, de madera o de cristal y golpes siempre recibe cuando la entrada prohíbe.
Del techo al suelo, cortada y fina, tela con vuelo.
Aunque yo nunca me mueva por mí suben, por mi bajan; soy de diversas materias y mi utilidad la halagan.
En la mesa me ponen y sobre mí todos comen.
Con mi cara tan cuadrada, lisa o con dibujitos, resignada y por los suelos, me repito, me repito...
Muchos golpes recibe cuando a la gente, la entrada prohíbe.
