Alto, alto, como un pino,
pesa menos que un comino.
más adivinanzas de la naturaleza...
Tengo lecho y no me acuesto tengo curso sin ser maestro.
Lleva años en el mar y aún no sabe nadar.
Cuatro puntos son y para distinguirlos necesitamos del sol.
No ves el sol, no ves la luna, y si está en el cielo no ves cosa alguna.
Él es tío sin sobrinos, a todos calienta igual. Si no sabes de quién hablo, tras la primavera vendrá.
Aparece por delante, por los lados, por la espalda, te descuidas un instante y te levanta la falda.
Es una enorme naranja pero de zumo salado, los gajos se le suponen entre un par de meridianos.
Desde el día en que nací, corro y corro sin cesar: corro de noche y de día hasta llegar a la mar.
Vuela sin alas, silba sin boca, azota sin manos y tú ni lo ves ni lo tocas.
¿Qué es, qué es, que te da en la cara y no lo ves?
