Aunque de comida voy cargado,
la gente me vacía,
y nunca soy tragado.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Caja llena de soldados, todos largos y delgados, con gorritos colorados.
Pequeña como una pera y alumbra la casa entera.
No soy el sol, tampoco el fuego; pero la casa bien que caliento.
Habla y no tiene boca, oye y no tiene oído, es chiquito y hace ruido, muchas veces se equivoca.
Poseo dientes y ojos y para hacerme trabajar me has de meter en cerrojos.
Una señorita de carnes muy blandas, que sin ser enferma siempre está en la cama.
Me compran para dormir y me encanta sacudir. ¿Qué soy?
Llevo secretos a voces, corriendo por esos mundos y sin que nadie los oiga los doy en unos segundos.
Aunque de comida voy cargado, la gente me vacía, y nunca soy tragado.
Lo usa el tendero para comer, lo lleva entero si sabes leer.
