Aunque de comida voy cargado,
la gente me vacía,
y nunca soy tragado.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Aunque músculos no tengo, los techos yo sostengo.
Llevo secretos a voces, corriendo por esos mundos y sin que nadie los oiga los doy en unos segundos.
Te lo digo y no me entiendes, no tengo boca y si tengo dientes
En lo más alto me ponen para que el viento me dé, soy guía para los hombres y siempre estoy de pié.
Pequeña como una pera y alumbra la casa entera.
Tiene un ojo y nada ve, por abrir no es cosa dura, sin embargo por cerrar, sí que cierra y sí que es dura.
De nada me sirven, estas cuatro patas, que quieta estoy siempre, sobre mí, el durmiente.
Dicen que quien lo tiene es muy gracioso, se sacude en la mesa contra lo soso.
Sube llena, baja vacía, y si no se da prisa, la sopa se enfría,
Tiene luna, no es planeta; tiene marco y no es puerta.
