Dos niñas van a la par,
y no se pueden mirar.
más adivinanzas del cuerpo humano...
¿Quién seré yo que encerrada soy donde quiera que voy, me encuentro siempre mojada y al cielo pegada estoy.
Son dos cortinas en dos ventanitas que bajando ocultan dos niñas bonitas.
Adivina, adivinanza, tiene un solo ojo y una cara ancha.
Del nogal vengo, y en el cuello del hombre, me cuelgo.
Tiene grandes pabellones, pero no tiene habitaciones.
Atrás panza y delante espinazo, aciértamelo pedazo de ganso.
Parecen persianas, que suben y bajan.
Hay en la plaza nueva un monte, y en él dos cuevas. Más abajo un pozo hondo que tiene el brocal rojo. Altas ventanas, iguales, y en ellas, dos niñas bellas que, a través de los cristales, todo lo ven y lo observan.
En la jirafa descuella, bajo la barba del rey, lo tiene cualquier botella, la camisa o el jersey.
¿Qué es rojo por dentro, y amable por fuera?
