adivinanzas para niños

Estoy condenado
a un año y un día;
si esto es cada cuatro,
¿mi nombre, sabrías?

 

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Nos llegan muy de mañana y se van mucho después, regresan cada semana y cuatro veces al mes.

Aquí estamos doce hermanos; yo, que el segundo nací, soy el menor entre todos: ¿Cómo puede ser así?

Cada año nazco gordito y cada año me muero flaquito. ¿Qué soy?

Los siete son hermanitos y viven un solo día: cuando uno nace otro muere, y así se pasan la vida.

Doce palomitas en un palomar, a la hora y a los cuartos salen a volar.

Dos hermanas en la plaza, ambas marchan a la par, si una da doce vueltas, la otra una, nada más.

Para unos soy muy corto; para otros, regular; para los tristes muy largo; para Dios, la eternidad.

Un árbol con doce ramas, cada rama, cuatro nidos; cada nido, siete pájaros: cada cual con su apellido.

Unas surgen con la luna, a otras las alumbra el sol, todas juegan al corro y todas hermanas son.

Tengo agujas y no sé coser, tengo números y no sé leer.