Nazco y muero sin cesar;
sigo no obstante existiendo,
y, sin salir de mi lecho,
me encuentro siempre corriendo.
más adivinanzas de la naturaleza...
Millares de soldaditos van unidos a la guerra, todos arrojan lanzas que caen sobre la tierra.
Vuela sin alas, silba sin boca, azota sin manos y tú ni lo ves ni lo tocas.
No soy estación del Metro ni soy estación del tren, pero soy una estación donde mil flores se ven.
Viene del cielo, del cielo viene, a unos disgusta y a otros mantiene.
Girando toda su vida, toda su vida girando y no aprendió a ser más rápida da una vuelta y tarda un día, da otra vuelta y tarda un año.
En mí se mueren los ríos, y por mí los barcos van, muy breve es el nombre mío, tres letras tiene no más.
Soy una bola grandota, que gira constantemente, y que desea saber, dónde meter tanta gente. Si ya sabes quien soy yo eres muy inteligente.
Como una peonza da vueltas al sol, gira que gira, sin tener motor.
Aparece por delante, por los lados, por la espalda, te descuidas un instante y te levanta la falda.
Cuatro puntos son y para distinguirlos necesitamos del sol.
