Ni corre, ni vuela,
pero siempre te precede,
cuando vas o cuando llegas.
más adivinanzas de cosas de la casa...
No soy el sol, tampoco el fuego; pero la casa bien que caliento.
Aunque yo nunca me mueva por mí suben, por mi bajan; soy de diversas materias y mi utilidad la halagan.
Una señorita de carnes muy blandas, que sin ser enferma siempre está en la cama.
Tengo dientes y no muerdo, desenredo con cuidado, caminos abro en tu pelo, ya sea liso o rizado.
Chiquita como un ratón guarda la casa como un león
Es tu favorita cuando sientes frío; la encuentras escrita en el verso mío.
Dicen que quien lo tiene es muy gracioso, se sacude en la mesa contra lo soso.
Del techo al suelo, cortada y fina, tela con vuelo.
Cuatro patas tiene y no puede andar también cabecera sin saber hablar.
¿Quién pensaréis que yo soy, que cuanto más y más lavo, mucho más sucia me voy?
