adivinanzas para niños

Podrás tocarlos,
podrás cortarlos,
pero nunca contarlos.

 

más adivinanzas del cuerpo humano...

Aunque sepas ésto, mago no serás, si no sabes dónde, lo digerirás.

Entre dos murallas blancas hay una flor colorada, que con lluvia o con buen tiempo, está siempre bien mojada.

Dos fuentes muy cristalinas están en medio de un llano y cuando las fuentes manan no está muy contento el amo.

¿Qué planta será la que en el hombre está?

Hay en la plaza nueva un monte, y en él dos cuevas. Más abajo un pozo hondo que tiene el brocal rojo. Altas ventanas, iguales, y en ellas, dos niñas bellas que, a través de los cristales, todo lo ven y lo observan.

Al revolver una esquina me encontré con un convento, las monjas vestidas de blanco, la superiora en el centro, más arriba dos ventanas, más todavía un par de espejos y en lo más alto la plaza donde pasean los caballeros.

¿Qué es rojo por dentro, y amable por fuera?

¿Cuál es la mitad de uno?

Dos niñas asomaditas, cada una a su ventana, lo ven y lo cuentan todo, sin decir una palabra.

Adivina, adivinanza, tiene un solo ojo y una cara ancha.