Rodeo cuellos y cuellos,
tanto de ellas como de ellos.
más adivinanzas de ropa y vestuario...
De pergaminos, o sedas, o papel hechos estamos; en verano gusto damos; las manos han de estar quedas, si es que nuestro oficio usamos.
Tamaño de una cazuela, tiene alas y no vuela.
Tienen justo cinco dedos como la mano; se rellenan en invierno, se vacían en verano.
Redondo, redondo, sin tapa, sin fondo.
Tengo cinco habitaciones, en cada una un inquilino, en invierno cuando hace frío, están todos calentitos.
Santa con nombre de flor, y, a pesar de este retrato, me confunden con zapato.
Por la noche me lo pongo, por el día me lo quito y en la siesta lo uso un poquito.
Dos buenas piernas tenemos y no podemos andar, pero el hombre sin nosotros no se puede presentar.
Mi ser por un punto empieza, por un punto ha de acabar, el que mi nombre acierte sólo dirá la mitad.
De día llenos de carne, de noche con la boca al aire.
