Por la noche me lo pongo,
por el día me lo quito
y en la siesta lo uso un poquito.
más adivinanzas de ropa y vestuario...
Tamaño de una cazuela, tiene alas y no vuela.
Tengo corazón sin ser persona, tengo bata sin ser mujer. y el hombre elegante me lleva delante.
Nuestra dueña nos coloca uno a cada lado, siempre pendientes, siempre colgados.
Con varillas me sostengo y con la lluvia voy y vengo.
Dos guaridas cálidas con sus escondrijos, para dos hermanas y sus quintillizos.
Ahí vienen dos: uno se moja y el otro no.
Mi padre al cuello la ata y, poco a poco, la aprieta hasta llegar a su meta.
Aunque las adornamos a ellas cuando no tenemos carreras, la gente tiene manía de no llamarnos enteras.
Resuélveme este dilema: «soy una, pero soy media».
Destacan en las orejas creyéndose independientes, van casi siempre en parejas.