Te lo digo y
no me entiendes,
no tengo boca y
si tengo dientes
más adivinanzas de cosas de la casa...
Aunque tengo cuatro patas, yo nunca puedo correr, tengo la comida encima, y no la puedo comer.
Cuatro patas tiene y no puede andar también cabecera sin saber hablar.
Tiene luna, no es planeta; tiene marco y no es puerta.
De nada me sirven, estas cuatro patas, que quieta estoy siempre, sobre mí, el durmiente.
Que timbre y número tenga y en verdad portal no sea es cierto, y el que desea hablar por él, no lo cuelga.
Pino sobre pino, sobre pino, lino, sobre lino, flores y alrededor amores.
Aunque soy iluminada siempre me tienen colgada.
Es tu favorita cuando sientes frío; la encuentras escrita en el verso mío.
Quien me mira se refleja así nadie tendrá una queja.
¿Quién será la desvelada, lo puedes tú discurrir? día y noche está acostada y no se puede dormir.
