Tengo lecho
y no me acuesto
tengo curso
sin ser maestro.
más adivinanzas de la naturaleza...
Es tan humilde y tan buena que hasta se deja pisar; para el almuerzo y la cena la vaca la va a tomar.
Van y llegan, se llevan lo que traen y lo que traen se llevan
En el cielo soy de agua, en la tierra soy de polvo, en las iglesias de humo y mancha blanca en los ojos.
En verano barbudo y en invierno desnudo, ¡esto es muy duro!
Como el algodón suelo en el aire flotar, a veces otorgo lluvia y otras, sólo humedad.
Vuela sin alas, silba sin boca, azota sin manos y tú ni lo ves ni lo tocas.
Lleva años en el mar y aún no sabe nadar.
Nazco y muero sin cesar; sigo no obstante existiendo, y, sin salir de mi lecho, me encuentro siempre corriendo.
Cuatro puntos son y para distinguirlos necesitamos del sol.
Hay un hijo que hace nacer a la madre que le dio el ser.
