Un convento bien cerrado,
sin campanas y sin torres
y muchas monjitas dentro,
preparan dulces de flores.
más adivinanzas de la naturaleza...
En verano barbudo y en invierno desnudo, ¡esto es muy duro!
Nazco y muero sin cesar; sigo no obstante existiendo, y, sin salir de mi lecho, me encuentro siempre corriendo.
Tengo lecho y no me acuesto tengo curso sin ser maestro.
Millares de soldaditos van unidos a la guerra, todos arrojan lanzas que caen sobre la tierra.
Lomos y cabeza tengo y aunque vestida no estoy, muy largas faldas mantengo.
No soy estación del Metro ni soy estación del tren, pero soy una estación donde mil flores se ven.
Nicanor tenía un barco y con él surcaba el río; ¿era este un barco pequeño o este era un gran navío? Lee despacio, Encarnación, y hallarás la solución.
Girando toda su vida, toda su vida girando y no aprendió a ser más rápida da una vuelta y tarda un día, da otra vuelta y tarda un año.
Un convento bien cerrado, sin campanas y sin torres y muchas monjitas dentro, preparan dulces de flores.
No ves el sol, no ves la luna, y si está en el cielo no ves cosa alguna.
