Una piel que es otra piel,
una mano que no es mano
y el frío se aguanta bien.
más adivinanzas de ropa y vestuario...
¡Escapa, escapa! que esto que te digo, aunque no te obligo, te abriga y te tapa.
Resuélveme este dilema: «soy una, pero soy media».
Ani lloró todo el día; perdió lo que más quería
Me lleváis, me traéis, y si sois nuevos quizás me mordéis.
Colgada voy por delante y al hombre hago elegante.
Tengo corazón sin ser persona, tengo bata sin ser mujer. y el hombre elegante me lleva delante.
Tienen justo cinco dedos como la mano; se rellenan en invierno, se vacían en verano.
Para salir a la esquina ponte pan en el talón y camina.
Con dos patas encorvadas y dos amplios ventanales quitan sol o dan visión según sean sus cristales.
Por la noche me lo pongo, por el día me lo quito y en la siesta lo uso un poquito.