Vuela sin alas,
silba sin boca,
azota sin manos
y tú ni lo ves ni lo tocas.
más adivinanzas de la naturaleza...
Van y llegan, se llevan lo que traen y lo que traen se llevan
Nazco y muero sin cesar; sigo no obstante existiendo, y, sin salir de mi lecho, me encuentro siempre corriendo.
Desde el día en que nací, corro y corro sin cesar: corro de noche y de día hasta llegar a la mar.
En mí se mueren los ríos, y por mí los barcos van, muy breve es el nombre mío, tres letras tiene no más.
Sin vacación en sus cursos, al principio son pequeños, suelen nacer en montañas y morir de marineros.
¿Qué es, qué es, que te da en la cara y no lo ves?
Girando toda su vida, toda su vida girando y no aprendió a ser más rápida da una vuelta y tarda un día, da otra vuelta y tarda un año.
Vuela en el aire, pace en la tierra, se posa en los árboles, anda en la mano, se deshace en el horno y se ahoga en el agua.
Viene del cielo, del cielo viene, a unos disgusta y a otros mantiene.
Alas de mil colores y se pierden entre las flores.
