Vuela sin alas,
silba sin boca,
azota sin manos
y tú ni lo ves ni lo tocas.
más adivinanzas de la naturaleza...
¿Qué es, qué es, que te da en la cara y no lo ves?
En el campo soy hallada y al fuego alimento. Donde quiera que soy llevada, es para darme tormento.
Es una enorme naranja pero de zumo salado, los gajos se le suponen entre un par de meridianos.
Es tan humilde y tan buena que hasta se deja pisar; para el almuerzo y la cena la vaca la va a tomar.
Él es tío sin sobrinos, a todos calienta igual. Si no sabes de quién hablo, tras la primavera vendrá.
Lleva años en el mar y aún no sabe nadar.
Girando toda su vida, toda su vida girando y no aprendió a ser más rápida da una vuelta y tarda un día, da otra vuelta y tarda un año.
Alto, alto, como un pino, pesa menos que un comino.
En el cielo soy de agua, en la tierra soy de polvo, en las iglesias de humo y mancha blanca en los ojos.
No soy estación del Metro ni soy estación del tren, pero soy una estación donde mil flores se ven.
