Vuela sin alas,
silba sin boca,
azota sin manos
y tú ni lo ves ni lo tocas.
más adivinanzas de la naturaleza...
Sin vacación en sus cursos, al principio son pequeños, suelen nacer en montañas y morir de marineros.
¿Qué es, qué es, que te da en la cara y no lo ves?
Nazco y muero sin cesar; sigo no obstante existiendo, y, sin salir de mi lecho, me encuentro siempre corriendo.
¿Cuál es el único animal que muere entre aplausos?
En mí se mueren los ríos, y por mí los barcos van, muy breve es el nombre mío, tres letras tiene no más.
En el campo soy hallada y al fuego alimento. Donde quiera que soy llevada, es para darme tormento.
Son mis colores tan brillantes que el cielo alegro en un instante.
No soy estación del Metro ni soy estación del tren, pero soy una estación donde mil flores se ven.
Nicanor tenía un barco y con él surcaba el río; ¿era este un barco pequeño o este era un gran navío? Lee despacio, Encarnación, y hallarás la solución.
Cuatro puntos son y para distinguirlos necesitamos del sol.
