Ya ves, ya ves,
tan claro que es.
No me la adivines
de aquí a un mes.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Doy vueltas y no soy tiempo, un secreto sé guardar, si no me cuidan, me pierdo. ¿Con mi nombre sabrás dar?
Golpe va, golpe viene y en su puesto se mantiene.
De mi madre nací yo, sin fundamento de padre, y luego me he muerto yo y de mi nació mi madre.
Aunque no hable, lo cuenta todo por cable.
A la entrada de tu casa algo suena si lo aprietan y tu sales presurosa a abrir deprisa la puerta.
¿Quién pensaréis que yo soy, que cuanto más y más lavo, mucho más sucia me voy?
Cuando la entrada yo les prohíbo, son muchos golpes los que recibo.
Ya ves, ya ves, tan claro que es. No me la adivines de aquí a un mes.
En un cuarto me arrinconan sin acordarse de mí, pero pronto van a buscarme cuando tienen que subir.
Es un campo colorado con los surcos muy derechos; muy en alto está situado e inclinado de dos lados.
