Ani lloró todo el día;
perdió lo que más quería
más adivinanzas de ropa y vestuario...
Me lleváis, me traéis, y si sois nuevos quizás me mordéis.
¡Escapa, escapa! que esto que te digo, aunque no te obligo, te abriga y te tapa.
Mi padre al cuello la ata y, poco a poco, la aprieta hasta llegar a su meta.
Juntos, en ovillo, duermen los mellizos; cuando se separan, estirados andan.
Tengo corazón sin ser persona, tengo bata sin ser mujer. y el hombre elegante me lleva delante.
Dos guaridas cálidas con sus escondrijos, para dos hermanas y sus quintillizos.
Soy de piel o paño gordo y me adhiero a tu cuerpo, para que no pases frío cuando llega el invierno.
Colgada voy por delante y al hombre hago elegante.
Con varillas me sostengo y con la lluvia voy y vengo.
De día llenos de carne, de noche con la boca al aire.