Sin ella en la mano
ni entras ni sales,
ni vas a la calle.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Sube llena, baja vacía, y si no se da prisa, la sopa se enfría,
Cuatro patas tiene y no puede andar también cabecera sin saber hablar.
Sale de la sala, entra en la cocina, meneando la cola como una gallina.
Tiene luna, no es planeta; tiene marco y no es puerta.
Llevo secretos a voces, corriendo por esos mundos y sin que nadie los oiga los doy en unos segundos.
Cuando te veo me ves, cuando me ves te veo, y no te parezco feo.
Del techo al suelo, cortada y fina, tela con vuelo.
De nada me sirven, estas cuatro patas, que quieta estoy siempre, sobre mí, el durmiente.
Una señorita de carnes muy blandas, que sin ser enferma siempre está en la cama.
Aunque tengo cuatro patas, yo nunca puedo correr, tengo la comida encima, y no la puedo comer.