Una capilla llena de gente
y un capellán en medio
que predica siempre
más adivinanzas del cuerpo humano...
Cueva con treinta y dos machacantes que dispone de un solo habitante.
Dos niños en un andén, por más que se acerquen, no se ven. ¿Qué es?.
¿Qué instrumento se puede escuchar, pero no se puede ver ni tocar?
Adivina, adivinanza, tiene un solo ojo y una cara ancha.
Atrás panza y delante espinazo, aciértamelo pedazo de ganso.
Laterales parapetos, que van siempre por parejas, les encantan los secretos.
Uno se cree superior, el otro inferior se siente, sin decirse nunca nada, mucho se quieren, tanto que, siempre se están besando.
Dos fuentes muy cristalinas están en medio de un llano y cuando las fuentes manan no está muy contento el amo.
Son dos cortinas en dos ventanitas que bajando ocultan dos niñas bonitas.
Uno larguito, dos más bajitos, otro chico y flaco, y otro gordazo.