adivinanzas para niños

Adivina, adivinanza,
tiene un solo ojo
y una cara ancha.

 

más adivinanzas del cuerpo humano...

Al revolver una esquina me encontré con un convento, las monjas vestidas de blanco, la superiora en el centro, más arriba dos ventanas, más todavía un par de espejos y en lo más alto la plaza donde pasean los caballeros.

Parecen persianas, que suben y bajan.

Con ella vives, con ella hablas, con ella rezas y hasta bostezas.

Aunque sepas ésto, mago no serás, si no sabes dónde, lo digerirás.

Cueva con treinta y dos machacantes que dispone de un solo habitante.

Laterales parapetos, que van siempre por parejas, les encantan los secretos.

Cuando sonríes asoman blancos como el azahar unas cositas que cortan y que pueden masticar.

Unas son redondas, otras ovaladas, unas piensan mucho, otras casi nada.

Una señora, muy enseñoreada, siempre va en coche y siempre va mojada.

Al dar la vuelta a la esquina tropecé con un convento, las monjas iban de blanco y el sacristán en el centro.