A muchos se lo suelen tomar
si antes no se ha ido a pelar.
más adivinanzas del cuerpo humano...
Sólo tres letras tengo pero tu peso yo sostengo. Si me tratas con cuidado, te llevaré a cualquier lado.
Cuando sonríes asoman blancos como el azahar unas cositas que cortan y que pueden masticar.
Adivina, adivinanza, tiene un solo ojo y una cara ancha.
Aunque sepas ésto, mago no serás, si no sabes dónde, lo digerirás.
Unas son redondas, otras ovaladas, unas piensan mucho, otras casi nada.
Uno larguito, dos más bajitos, otro chico y flaco, y otro gordazo.
Al revolver una esquina me encontré con un convento, las monjas vestidas de blanco, la superiora en el centro, más arriba dos ventanas, más todavía un par de espejos y en lo más alto la plaza donde pasean los caballeros.
Dos estrellas se han perdido, en el cielo no aparecen, en tu casa se han metido y en tu cara resplandecen. ¿Qué son?
En un huerto no muy llano hay dos cristalinas fuentes, no está a gusto el hortelano, cuando crecen las corrientes.
Al dar la vuelta a la esquina tropecé con un convento, las monjas iban de blanco y el sacristán en el centro.
