Aunque yo nunca me mueva
por mí suben, por mi bajan;
soy de diversas materias
y mi utilidad la halagan.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Del techo al suelo, cortada y fina, tela con vuelo.
Un barbecho bien labrado, ni entra mula, ni entra arado.
Es verdad que tú le miras, es mentira que te ve, sois iguales uno al otro, está claro que eres él.
Muy bonito por delante y muy feo por detrás; me transformo a cada instante, pues imito a los demás.
Cuando te veo me ves, cuando me ves te veo, y no te parezco feo.
Pequeña como una pera y alumbra la casa entera.
Ruedo y ruedo, y en los bolsillos me quedo.
¿Quién pensaréis que yo soy, que cuanto más y más lavo, mucho más sucia me voy?
Cabecita fría la noche haces día cuando te restriego, cabeza de fuego.
Siempre andamos por el suelo de alcobas y de salones y en historias orientales hasta hacemos algún vuelo.
