Cuatro patas tiene
y no puede andar
también cabecera
sin saber hablar.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Cuando la entrada yo les prohíbo, son muchos golpes los que recibo.
Que timbre y número tenga y en verdad portal no sea es cierto, y el que desea hablar por él, no lo cuelga.
Es una pera colgada que toda la casa alumbra sin tener humo ni llama.
Un barbecho bien labrado, ni entra mula, ni entra arado.
La cara que yo acaricio, dejo de seda al momento, porque ni un pelo se resiste a mi marcha, ¡buen invento!
Te lo digo y no me entiendes, no tengo boca y si tengo dientes
En la mesa me ponen y sobre mí todos comen.
De nada me sirven, estas cuatro patas, que quieta estoy siempre, sobre mí, el durmiente.
Como conoce la clave, gira por su laberinto y deja entrar al recinto.
Cuatro patas tiene y no puede andar también cabecera sin saber hablar.
