Dos buenas piernas tenemos
y no podemos andar,
pero el hombre sin nosotros
no se puede presentar.
más adivinanzas de ropa y vestuario...
No me utilizan los patos más me llevan de apellido, con «Z» empieza mi nombre, ¡y ya el resto es pan comido!
En tus manos estoy limpio, en tus ventanas me ensucio, si sucio, me ponen limpio, si limpio, me ponen sucio.
Me lleváis, me traéis, y si sois nuevos quizás me mordéis.
Santa con nombre de flor, y, a pesar de este retrato, me confunden con zapato.
Tengo corazón sin ser persona, tengo bata sin ser mujer. y el hombre elegante me lleva delante.
Juntos, en ovillo, duermen los mellizos; cuando se separan, estirados andan.
Resuélveme este dilema: «soy una, pero soy media».
Mi padre al cuello la ata y, poco a poco, la aprieta hasta llegar a su meta.
Ani lloró todo el día; perdió lo que más quería
Dos guaridas cálidas con sus escondrijos, para dos hermanas y sus quintillizos.
