El pie tapo al instante
igual que si fuera un guante.
más adivinanzas de ropa y vestuario...
Guardado en invierno, lo luzco en verano, es mi único traje en sitios de baño.
Con varillas me sostengo y con la lluvia voy y vengo.
Juntos, en ovillo, duermen los mellizos; cuando se separan, estirados andan.
Una piel que es otra piel, una mano que no es mano y el frío se aguanta bien.
Tienen justo cinco dedos como la mano; se rellenan en invierno, se vacían en verano.
Pisados, siempre en el suelo, recibiendo malos tratos, y sin señales de duelo.
Por la noche me lo pongo, por el día me lo quito y en la siesta lo uso un poquito.
Dos hermanitos muy igualitos, en llegando a viejecitos abren los ojitos.
Santa con nombre de flor, y, a pesar de este retrato, me confunden con zapato.
Colgada voy por delante y al hombre hago elegante.