Dos hermanitos muy igualitos,
en llegando a viejecitos
abren los ojitos.
más adivinanzas de ropa y vestuario...
Aunque las adornamos a ellas cuando no tenemos carreras, la gente tiene manía de no llamarnos enteras.
Ahí vienen dos: uno se moja y el otro no.
Guardado en invierno, lo luzco en verano, es mi único traje en sitios de baño.
No he de darte más razones, sin mi perderías los pantalones.
Por la noche me lo pongo, por el día me lo quito y en la siesta lo uso un poquito.
Una copa redonda y negra, boca arriba está vacía, boca abajo está llena.
El pie tapo al instante igual que si fuera un guante.
Mi ser por un punto empieza, por un punto ha de acabar, el que mi nombre acierte sólo dirá la mitad.
Rodeo cuellos y cuellos, tanto de ellas como de ellos.
En tus manos estoy limpio, en tus ventanas me ensucio, si sucio, me ponen limpio, si limpio, me ponen sucio.
