Dos niñas asomaditas,
cada una a su ventana,
lo ven y lo cuentan todo,
sin decir una palabra.
más adivinanzas del cuerpo humano...
Sólo tres letras tengo pero tu peso yo sostengo. Si me tratas con cuidado, te llevaré a cualquier lado.
Juntos vienen, juntos van, uno va delante, otro va detrás.
Adivina, adivinanza, tiene un solo ojo y una cara ancha.
Cueva con treinta y dos machacantes que dispone de un solo habitante.
Dicen que son de dos, pero siempre son de una.
Oscuro fue mi nacimiento, y de blanco me vestí. Pocas personas me quieren, mas tienen respeto por mi. ¿Qué es?
Si aciertas esta pregunta, te anotarás un buen tanto: ¿qué cosa acabada en punta tienes entre risa y llanto?
Hay en la plaza nueva un monte, y en él dos cuevas. Más abajo un pozo hondo que tiene el brocal rojo. Altas ventanas, iguales, y en ellas, dos niñas bellas que, a través de los cristales, todo lo ven y lo observan.
¿Qué planta será la que en el hombre está?
¿Quién seré yo que encerrada soy donde quiera que voy, me encuentro siempre mojada y al cielo pegada estoy.
