Dos niñas asomaditas,
cada una a su ventana,
lo ven y lo cuentan todo,
sin decir una palabra.
más adivinanzas del cuerpo humano...
Dicen que son de dos, pero siempre son de una.
Si los abro veo si los cierro sueño.
Cueva con treinta y dos machacantes que dispone de un solo habitante.
Dos niñas van a la par, y no se pueden mirar.
Entre dos murallas blancas hay una flor colorada, que con lluvia o con buen tiempo, está siempre bien mojada.
En un huerto no muy llano hay dos cristalinas fuentes, no está a gusto el hortelano, cuando crecen las corrientes.
A muchos se lo suelen tomar si antes no se ha ido a pelar.
Formamos, como soldados, en una fila y somos carniceros toda la vida
Pozo hondo, soga larga, y si no se dobla no alcanza.
Dos niñas asomaditas, cada una a su ventana, lo ven y lo cuentan todo, sin decir una palabra.
