adivinanzas para niños

Durante el verano escondido,
en el invierno encendido.

 

más adivinanzas de cosas de la casa...

Adivíname ésa.

Fui a la plaza y compré un negrito. Llegué a la casa y se puso coloradito. ¿Qué es?

Cabecita fría la noche haces día cuando te restriego, cabeza de fuego.

Soy liso y llano en extremo, y, aunque me falta la voz, digo en su cara a cualquiera la más leve imperfección; contesto al que me pregunta sin lisonja ni aflicción, y si mala cara pone, la misma le pongo yo.

Un campo bien labrado no gasta reja ni arado.

Los tejados protejo y buenas canales dejo.

Su forma es de pera, aunque es de cristal da luz sin espera para cada cual.

De nada me sirven, estas cuatro patas, que quieta estoy siempre, sobre mí, el durmiente.

Aunque al dormir me consultan, nunca suelo contestar.

Habla y no tiene boca, oye y no tiene oído, es chiquito y hace ruido, muchas veces se equivoca.