adivinanzas para niños

Hoy cuando me levanté,
puse uno en cada pie.
Como no son los zapatos,
dime tú… ¿qué puede ser?

 

más adivinanzas de ropa y vestuario...

Por la noche me lo pongo, por el día me lo quito y en la siesta lo uso un poquito.

Ahí vienen dos: uno se moja y el otro no.

En las manos de las damas casi siempre estoy metido, unas veces desplegado otras veces recogido.

Tengo cinco habitaciones, en cada una un inquilino, en invierno cuando hace frío, están todos calentitos.

De día llenos de carne, de noche con la boca al aire.

Santa con nombre de flor, y, a pesar de este retrato, me confunden con zapato.

Aunque las adornamos a ellas cuando no tenemos carreras, la gente tiene manía de no llamarnos enteras.

Una copa redonda y negra, boca arriba está vacía, boca abajo está llena.

Me pisas y no me quejo, me cepillas si me mancho, y con mi hermano gemelo bajo tu cama descanso.

Colgada voy por delante y al hombre hago elegante.