adivinanzas para niños

Muy chiquito, chiquitito,
que pone fin a lo escrito.

 

más adivinanzas de libros y escritura...

Sin ser árbol, tengo hojas, sin ser bestia, un buen lomo y mi nombre en cada tomo.

Llanura blanca con flores negras; cinco bueyes aran en ella.

Soy pequeño, pequeñito, más con tal poder y arte que, si no me pegan bien, no van a ninguna parte.

Tengo hojas sin ser árbol, te hablo sin tener voz, si me abres no me quejo, adivina quien soy yo.

Es un sabio gordinflón, si le preguntan no habla, sabe todas las respuestas, tiene todas las palabras.

Dos son tres, tres son cuatro y cuatro son seis. ¿Qué son?

Con mis hojas bien unidas, que no me las lleva el viento, no doy sombra ni cobijo, pero enseño y entretengo.

Soy blanca como la nieve, me ponen sobre una mesa, para escribir sobre mí cuanto venga a la cabeza.

No me hace falta sacar pasaje: me mojan la espalda y me voy de viaje.

Sin hablar puedo decir lo que mi dueño ha pensado; tengo un carro, aunque sin mula, y me muero en tres espacios.