¿Quién seré yo que encerrada
soy donde quiera que voy,
me encuentro siempre mojada
y al cielo pegada estoy.
más adivinanzas del cuerpo humano...
Si los abro veo si los cierro sueño.
Al dar la vuelta a la esquina tropecé con un convento, las monjas iban de blanco y el sacristán en el centro.
Como la piedra son duros, para el perro un buen manjar, y sin ellos no podrías ni saltar ni caminar.
Parecen persianas, que suben y bajan.
Ordenes da, órdenes recibe, algunas autoriza, otras prohíbe.
¿Cuál es la mitad de uno?
¿Qué planta será la que en el hombre está?
¿Qué instrumento se puede escuchar, pero no se puede ver ni tocar?
Dos estrellas se han perdido, en el cielo no aparecen, en tu casa se han metido y en tu cara resplandecen. ¿Qué son?
Cinco hermanos muy unidos, que no se pueden mirar, cuando riñen aunque quieras, no los puedes separar.
