Al revolver una esquina
me encontré con un convento,
las monjas vestidas de blanco,
la superiora en el centro,
más arriba dos ventanas,
más todavía un par de espejos
y en lo más alto la plaza
donde pasean los caballeros.
más adivinanzas del cuerpo humano...
¿Qué planta será la que en el hombre está?
Cinco hermanos muy unidos, que no se pueden mirar, cuando riñen aunque quieras, no los puedes separar.
Aunque sepas ésto, mago no serás, si no sabes dónde, lo digerirás.
No es reloj, pero hace TIC TAC, no usa pilas pero no para de andar...
¿Qué instrumento se puede escuchar, pero no se puede ver ni tocar?
¿Quién seré yo que encerrada soy donde quiera que voy, me encuentro siempre mojada y al cielo pegada estoy.
Dos estrellas se han perdido, en el cielo no aparecen, en tu casa se han metido y en tu cara resplandecen. ¿Qué son?
Podrás tocarlos, podrás cortarlos, pero nunca contarlos.
Laterales parapetos, que van siempre por parejas, les encantan los secretos.
Atrás panza y delante espinazo, aciértamelo pedazo de ganso.
