Con sus páginas abiertas
te va ilustrando la mente,
si alguna vez lo prestaras,
lo perderás para siempre.
más adivinanzas de libros y escritura...
Todas las palabras sé y, aunque todas las explico, nunca las pronunciaré.
Campo blanco, flores negras, un arado, cinco yeguas.
No me hace falta sacar pasaje: me mojan la espalda y me voy de viaje.
Cruza los ríos, también los mares, vuela sin alas a todas partes.
Suelo ir de mano en mano, hojas tengo y no soy flor, y aun teniendo muchas letras no soy de nadie deudor.
Soy blanca como la nieve, me ponen sobre una mesa, para escribir sobre mí cuanto venga a la cabeza.
Sin hablar puedo decir lo que mi dueño ha pensado; tengo un carro, aunque sin mula, y me muero en tres espacios.
Blancos son los campos, las semillas negras, cinco son los bueyes que el arado llevan.
Entre mis hojas se esconden hadas, princesas y duendes. Cuando me lees de noche, sin darte cuenta te duermes.
Sabana blanca tendida, mariquita negra le baila encima.
