No es reloj,
pero hace TIC TAC,
no usa pilas
pero no para de andar…
más adivinanzas del cuerpo humano...
Una capilla llena de gente y un capellán en medio que predica siempre
Parecen persianas, que suben y bajan.
Cueva con treinta y dos machacantes que dispone de un solo habitante.
Guardada en estrecha cárcel por soldados de marfil, está una roja culebra, que es la madre del mentir.
¿Cuál es la mitad de uno?
Hay en la plaza nueva un monte, y en él dos cuevas. Más abajo un pozo hondo que tiene el brocal rojo. Altas ventanas, iguales, y en ellas, dos niñas bellas que, a través de los cristales, todo lo ven y lo observan.
Unas son redondas, otras ovaladas, unas piensan mucho, otras casi nada.
Atrás panza y delante espinazo, aciértamelo pedazo de ganso.
Laterales parapetos, que van siempre por parejas, les encantan los secretos.
Uno larguito, dos más bajitos, otro chico y flaco, y otro gordazo.
