Nicanor tenía un barco
y con él surcaba el río;
¿era este un barco pequeño
o este era un gran navío?
Lee despacio, Encarnación,
y hallarás la solución.
más adivinanzas de la naturaleza...
Vuela sin alas, silba sin boca, azota sin manos y tú ni lo ves ni lo tocas.
Soy una bola grandota, que gira constantemente, y que desea saber, dónde meter tanta gente. Si ya sabes quien soy yo eres muy inteligente.
Un convento bien cerrado, sin campanas y sin torres y muchas monjitas dentro, preparan dulces de flores.
En verano barbudo y en invierno desnudo, ¡esto es muy duro!
Vuela en el aire, pace en la tierra, se posa en los árboles, anda en la mano, se deshace en el horno y se ahoga en el agua.
Como el algodón suelo en el aire flotar, a veces otorgo lluvia y otras, sólo humedad.
Muchas monjitas en un convento, visitan las flores y hacen dulces dentro.
En el campo soy hallada y al fuego alimento. Donde quiera que soy llevada, es para darme tormento.
Viene del cielo, del cielo viene, a unos disgusta y a otros mantiene.
Van y llegan, se llevan lo que traen y lo que traen se llevan
