Redondito, redondón,
no tiene tapa ni tapón.
más adivinanzas de ropa y vestuario...
Con varillas me sostengo y con la lluvia voy y vengo.
Soy de piel o paño gordo y me adhiero a tu cuerpo, para que no pases frío cuando llega el invierno.
Colgada voy por delante y al hombre hago elegante.
Tienen justo cinco dedos como la mano; se rellenan en invierno, se vacían en verano.
Hoy cuando me levanté, puse uno en cada pie. Como no son los zapatos, dime tú... ¿qué puede ser?
Destacan en las orejas creyéndose independientes, van casi siempre en parejas.
Ahí vienen dos: uno se moja y el otro no.
Dos hermanitos muy igualitos, en llegando a viejecitos abren los ojitos.
Mi padre al cuello la ata y, poco a poco, la aprieta hasta llegar a su meta.
En tus manos estoy limpio, en tus ventanas me ensucio, si sucio, me ponen limpio, si limpio, me ponen sucio.
